El Yoga y Ayurveda son parte de las ciencias Védicas y permiten equilibrar cuerpo-mente y espíritu.
Estas ciencias son totalmente hermanas y comparten las mismas bases filosóficas como las Purushartras (Dharma o el camino en coherencia contigo mismo, Kama o deseo, Moksha o liberación, Aarth o la riqueza y la abundancia).
También comparten los principios de Gunas o cualidades mentales (Satva, Rajas y Tamas) y los principios de las ramas del Yoga como Yama, Nyiama, las purificaciones, la meditación, Asanas…
En este artículo os daré información sobre la mirada del Yoga y Ayurveda acerca de vuestra práctica de Yoga Asana enfocada en los humores o biotipos (doshas).
Toda esta información esta basada en lecturas de los libros de «Yoga y Ayurveda» de David Frawley. Si os interesa, os recomiendo leerlos.
Las asanas son beneficiosas para todo el mundo pero los que más las necesitan son las personas con constitución Vata porque son propicios a desequilibrios posturales, y a tener escoliosis.
Las personas Kapha necesitan prácticas energéticas para combatir la letargia como los saltos o vinyasa.
Los Pitta se benefician de las asanas que refrescan y calman su mente muy activa y ambiciosa.
Hay dos aspectos a tener en cuenta. El primero es la actitud y la manera con la que se practica y la segunda es las asanas que se eligen. Se puede hacer una postura supuestamente buena pero si se hace mal será peor que si se hace una postura que en principio no estaba indicada para su constitución pero se hace dentro de una secuencia que equilibrada.
Hay que saber que hay personas vatas con desequilibrios pitta, entonces habrá que hacer posturas para reducir el pitta.
Las asanas hechas despacio y suavemente, con posturas mantenidas mucho tiempo reduce vata. Las asanas refrescantes, relajantes reducen pitta y las posturas hechas una detrás de otras que aumentan el calor y necesitan esfuerzo reduce kapha.
Como las asanas forman parte de una secuencia, podemos combinar yoga y doshas de manera equilibrada. Es decir, se pueden hacer posturas que no están indicadas para una constitución cuando se compensan con otras. Por ejemplo, si una persona pitta hace una postura sobre la cabeza es muy importante que haga la postura de la vela para reducir el calor después.
Las personas vata son delgadas y de huesos finos. De jóvenes son flexibles y ágiles pero les faltan energía y resistencia. Vata controla los huesos y articulaciones y los vatas suelen sufrir de artritis sobre todo después de los 50. Tienen generalmente frío y la piel seca, las articulaciones que crujen y mala circulación. Tienden a tener escoliosis.
Las asanas son muy importantes para su salud y para poder sentarse a meditar. Lo mejor para vata es mantener la columna flexible y todas las articulaciones en general pero hay que evitar las prácticas muy fuertes que generan mucho cansancio o lesiones.
Hay que practicar con una mente serena.
Hay que quitar tensión de las caderas y de las lumbares así como los sacroilíacos. Las posturas sentadas como Siddhasana, Vajrasana crean fuerza y estabilidad en la parte baja del abdomen. Son posturas calmantes que aumentan la sensación de anclaje y controlan apana vayu.
En definitiva la práctica adecuada para vata debe de ser moderada y alternar movimientos con posturas sentadas mantenidas por un largo tiempo para preparar para el pranayama (Kapalabati, respiración de fuego o Nadi Shodana, respiración alternada) y la meditación.
Después de la práctica se debería sentirse con tranquilidad y con algo de sensación de calor.
Los pitta no son demasiado pequeños ni demasiado grandes, ni muy gordos ni muy delgados. Tienen buena musculatura y flexibilidad debido a su buena circulación y a la calidad lubricadora de pitta en las articulaciones. Son buenos practicantes cuando se dedican a ello pero pueden crear exceso de movilidad en las articulaciones si practican demasiado intensamente.
Psicológicamente son agresivos y les gustan brillar y hacer las cosas bien. Pueden convertir la práctica de asanas y eso les aleja del verdadero objetivo de la práctica que es autoconocimiento y libertad. Quiero decir, vencer la dualidad de la mente.
Los pittas suelen ser ambiciosos e irritables. Las asanas deberían de servir para refrescar su mente y apaciguar sus emociones. Eso les ayudará a dirigir su inteligencia hacia dentro y a conocerse.
La respiración durante la práctica debe de ser tranquila y necesitan realizar asanas sentados entre las posturas más fuertes para eliminar el estrés que pueden generar.
Es importante evitar una sudoración excesiva.
Hay que evitar calentar la sangre y evitar traer demasiada sangre a la cabeza.
Pueden practicar intensamente siempre que compensen con posturas refrescantes y pranayama refrescante (Shitali).
Según la ciencia yoguica el centro solar está donde del ombligo y el centro lunar en el paladar posterior, que está blando.
En el paladar se secreta la saliva que tiene un efecto refrescante, Sarvangasana y Halasana son posturas refrescantes. Los pittas se benefician de las posturas que quitan tensión de la parte media del abdomen (intestino delgado e hígado) donde se acumula pitta.
Dhanurasana, Bhujangasana, los barcos, el pez son posturas adecuadas. Siempre compensar Sirsasana con Sarvangasana.
Las posturas hacia delante cuando se hacen despacio y se mantienen son refrescantes y trabajan la parte media del abdomen.
Las posturas hacia atrás se compensarán con otras refrescantes.
Las posturas sentadas son buenas para limpiar el hígado.
Al terminar la práctica los pittas deberían de sentirse relajados y frescos, contentos y con la mente clara.
Las personas Kapha son de constitución fuerte y cogen peso fácilmente. Tienen poca flexibilidad y no deberían de esforzarse en hacer posturas muy avanzadas como el loto porque no son apropiadas para sus articulaciones.
Las mujeres kapha pueden ser delgadas pero pueden ganar peso fácilmente especialmente después de su primer hijo.
Deben de cuidar no tener sobrepeso pero sin hacer dietas demasiado exigentes.
La grasa se acumula en el abdomen y los muslos y el centro de gravedad cambia generando hombros encorvados.
El exceso de kapha crea mucosidad en el pecho y de allí se mueve en diferentes partes del cuerpo. Aumenta la grasa en las articulaciones y en la superficie del cuerpo.
Algunos kaphas sufren de artritis y mala circulación. Hay exceso de líquido sinovial, quistes.
Los kaphas suelen ser sedentarios y raramente activos físicamente salvo que se les motive o que estén obligados a ello.
Hay que estimular el metabolismo y la circulación. Tienen que incrementar gradualmente su actividad física sobre todo si tiene sobrepeso.
Pueden tener problemas de corazón y colesterol, por eso no hay que fatigar el corazón con los ejercicios. Kapha es como un río helado.
Sus movimientos están inhibidos por el frío. Con el calor creado por los ejercicios y las respiración profunda el hielo se derrite. No tiene que ser brusco.
Los kaphas necesitan hacer más ejercicio de lo que quisieran y creer que pueden hacer más de lo que creen que pueden hacer.
Después de la práctica deberían de sentirse calientes y vigorosos con el pecho abierto y la mente despierta. El uso del pranayama Bastrika es muy recomendable con movimiento de brazos.
Espero que toda esta información te permita practicar con un enfoque más acercado a tu biotipo y puedas aprovechar el beneficio que nos brinda en conjunto el yoga y ayurveda.
Si te interesa te propongo clases individuales y en grupo de Hatha Yoga enfocado en la filosofía Ayurveda y del Yoga del Sonido con canto de mantra y meditaciones guiadas.
Feliz Vida Namaste
Madrid Capital y Tenerife
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